Durante tres años, Rihanna mantuvo un perfil bajo respecto al caso judicial que ha perseguido a su pareja, el rapero A$AP Rocky, desde su arresto en abril de 2022. Acusado de haber disparado un arma de fuego contra un conocido, Terell Ephron, en un incidente ocurrido en 2021, Rocky ha estado enfrentando un proceso legal largo, tenso y seguido por millones de personas en todo el mundo. Pero lo que nadie esperaba era que, en la audiencia celebrada esta mañana en Los Ángeles, Rihanna apareciera en la sala del tribunal, sorprendiendo tanto a los medios como a los asistentes, con una declaración que dejaría a todos sin palabras.
Vestida de manera sobria, con una expresión firme y sin rastro de maquillaje extravagante, la estrella internacional de la música y empresaria multimillonaria entró a la sala acompañada de su equipo legal. Su sola presencia ya era suficiente para detener los murmullos y los flashes. Pero fue su intervención, breve y cargada de significado, la que dejó a todos en completo silencio durante varios segundos. “Estoy aquí porque creo en la verdad, y también creo en la persona que conozco desde hace años como padre de mis hijos, como compañero, como ser humano. No estoy defendiendo un crimen, estoy defendiendo a un hombre que ha sido reducido a un titular,” dijo Rihanna ante el juez y los presentes.
Sus palabras, pronunciadas con una calma intensa, causaron una mezcla de reacciones inmediatas. Mientras algunos vieron su intervención como un acto de lealtad conmovedor, otros la interpretaron como una maniobra calculada para proteger la imagen de la familia que ha construido junto a Rocky, con quien tiene dos hijos: RZA y Riot. Las redes sociales se incendiaron al instante. Algunos la elogiaban por apoyar públicamente al padre de sus hijos en un momento tan delicado, mientras que otros criticaban duramente su presencia, acusándola de ignorar la gravedad de las acusaciones.
Durante estos tres años, Rihanna había evitado hacer comentarios directos sobre el proceso legal. En entrevistas y apariciones públicas, siempre esquivó preguntas relacionadas con el caso, concentrándose en su carrera empresarial y en su rol como madre. Su aparición en la corte marca un giro inesperado y añade una nueva capa de complejidad al drama que ha envuelto su vida personal desde 2022.
El juicio aún continúa y no se espera un veredicto definitivo hasta finales de 2025. Sin embargo, el momento vivido hoy ya se considera uno de los puntos más mediáticos y tensos del caso. Con una sola declaración, Rihanna no solo rompió su silencio, sino que reabrió el debate público sobre hasta qué punto el amor y la lealtad deben llegar cuando la justicia está en juego.